Localidad
En el siglo XVIII se descubrieron unos restos romanos, entre los que destacan sus baños, datados en el tercer siglo A.C. Más recientemente, se han descubierto más restos romanos de épocas más recientes, correspondientes a los siglos II y I A.C. donde aparecen enterramientos y dependencias habitables con mármoles.
Es una de las varias aldeas que donó Alfonso X a Vitoria, en 1258.
El templo tiene un pórtico del siglo XVIII, con tres arcos. En el interior, llama la atención la pila bautismal, uno de los ejemplares más bellos de la diócesis, con relieves de círculos, estrellas y figuras geométricas.