La iglesia de San Cornelio y San Cipriano se encuentra situada en un lugar privilegiado, en medio de todas las casas. Se sabe de la existencia de un templo románico dedicado a San Martín, que podría ser la primitiva iglesia del pueblo.

Delante del pórtico se abre un atrio rodeado de por un muro de piedra y en el centro hay una cruz moderna. La portada tiene signos del siglo XIII.

También se guarda la urna, una joya de arte románico en orfebrería y esmaltes, con el cráneo de San Formerio, procedente de la ermita del patrono de Treviño. Una ermita, situada a 750 metros de altitud y desde donde se domina mucha parte del Condado. Templo del siglo XII, que tiene una pequeña necrópolis de piedra en los alrededores. En el interior de la ermita hay un mausoleo impresionante, donde se guardan las reliquias del santo en un arca con seis llaves.

De vuelta al pueblo, podemos ver varias casas muy bien cuidadas, donde destaca una de ellas por el pequeño museo que hay en una de sus fachadas con aperos de labranza antiguos. Es interesante el reloj de sol de la fachada de la Iglesia, que data del año 1699, como se indica en la losa donde está hecho.