Las casas se distribuyen en grupos en torno a los dos caminos que atraviesan el pueblo. Y aisladas de las casas labriegas, se encuentran la ermita de Santa Lucía y la casa de Venta Blanca, donde se encontraba la ermita de la Virgen Blanca y cuya imagen se puede ver en una capilla. En su fachada, podemos ver el escudo de los Anchoriz, propietarios del edificio desde el año 1934.

Un edificio que fue propiedad de la Condesa de Montehermoso, María Pilar Acedo y Sarría, adquirida por una herencia antigua de un antepasado, ya en el año 1580. También podemos pasar junto a la Venta Burguillos, donde vive la misma familia desde al menos 1747.

Destaca la Casa-torre de Villamaderne, convertida en Palacio en el siglo XVI.

Aquí está la espadaña más bonita. Consta de cuatro cuerpos, con un arco en su planta baja y rematada por tres pisos de espadañas pequeñas y arcos de medio punto. La iglesia de San Millán es una construcción románica, reformada en el siglo XX.