El último de los cuatro pueblos que componían el municipio denominado Valle de Arrastaria, absorbido por Amurrio en 1976.

La historia de la iglesia de San Juan es muy curiosa. En 1723, figuraban dos parroquias: la de San Juan, más alejada del pueblo y la de San Fausto, en el actual cementerio. La mayor parte del culto se celebraba en la de San Fausto y eso hizo que la de San Juan se fuese deteriorando, hasta quedar en estado ruinoso. Con el paso del tiempo, hicieron otra nueva en 1882, bajo la advocación de San Juan y la otra se quedó como capilla del cementerio. La espadaña se levantó en el año 1923.