Además de su famosa bodega del Marqués de Riscal, Elciego es famoso por las diferentes fiestas y danzas que tiene. Si espectaculares son las danzas a la Virgen de la Plaza, no menos interesante es la Fiesta de la Bandera, en recuerdo del día en el que el rey Felipe II le dio el título a la Villa.

Varias son las casas o palacios barrocos que nos podemos encontrar paseando por las calles. La casa de los hierros, con sus magníficos herrajes, la Casa Consistorial, con balcón corrido y el escudo real en la fachada o la ermita de la Virgen de la Plaza, edificada en 1764 y que acoge la maravillosa Andramari, patrona de la Villa, son claros ejemplos, todos ellos situados en la Plaza Mayor. Pero si andamos unos pasos más, nos topamos con la Casa de los Acha, con su escudo esquinero o con la Casa de los Zárate-Navarrete, luciendo su propio escudo en la fachada.

Y así, hasta llegar a la iglesia de San Andrés. Templo con una magnífica portada y dos torres desiguales.