Localidad importante en la zona por ser la sede del linaje que lleva su nombre. Fue el origen de pequeños señoríos cuartangueses: el de Corcuera, el de Artazuela, el de Ermenetu y el de Tortura, donde existieron sus respectivos monasterios.

La Casa-Torre, construida en el siglo XII a la entrada del pueblo, junto a la iglesia de San Pedro contiene el testimonio más antiguo de la batalla romana más antigua en Euzkadi, la batalla de Andagoste.

El edificio fue un centro bajomedieval de carácter religioso y residencial. Lo forman un pequeño monasterio, una torre de defensa y otras casas de servicio. En el interior del pórtico, van dos escudos de los Urbinas, que se repite encima de la puerta. La iglesia puede contarse entre las más antiguas del territorio alavés.